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Unas hojitas de menta


Hay muchísimas cosas que son tan pequeñas que mucha gente no se da cuenta de ellas. No creas que hace falta ser simple de espíritu para ocuparse de la cocina. No pienses nunca que sentarse, levantarse, ir y venir, que todo lo que haces no es importante a los ojos de Dios.

Dios no va a preguntarte cuántos libros has leído, ni cuántos milagros has hecho. Te preguntará si lo has hecho lo mejor que has podido por amor a él. ¿Puedes sinceramente decir:” he hecho todo lo que he podido?” Aunque lo más y mejor acabe siendo un fracaso, debe ser nuestro más y mejor. Si realmente estás enamorado de Cristo, por modesto que sea tu trabajo, lo harás lo mejor que puedas, con todo el corazón. Es tu trabajo lo que dará testimonio de tu amor. Puedes agotarte en el trabajo, e incluso puedes matarte, pero es inútil en tanto que no está impregnado de amor. (Beata Teresa de Calcuta)


Leí esta reflexión hace días y no me dejó indiferente. A veces me asusta lo que mueve la vida de muchos. Vivimos en una constante búsqueda hedonista, de que se reconozca y valore lo que realizamos, se busca la alabanza,  la sonrisa, la felicitación. Cualquier contrariedad, reproche, corrección, se contesta de forma  asaltante: “Yo no he sido, yo no lo he hecho“.Se huye de la humillación, nos repele.

¿Habéis pensado, como se puede convertir toda nuestra jornada en un día de amor? Es tan sencillo, como detenerse por un momento en lo que hacemos y decirle a Dios:" ¡Lo voy ha hacer lo mejor que pueda por amor a ti!". ¿Y cómo es lo mejor que pueda? Voy a poner atención, cogeré una dosis de alegría, otra de cariño, un poquito de renuncia, una gran cantidad de entusiasmo e ilusión porque lo pequeño se va a convertir en algo grande.

Nos regalaron hace días unas fresas. Comprar tan rica fruta en este tiempo, es algo que nuestros bolsillos no pueden permitirse, así que valoramos enormemente el detalle de quien nos las ofreció. En casa gustan muchísimo.

Como tenía fiesta, le dije a mi esposa que yo haría la cena. Estaba solo en casa, así que ví las fresas en la nevera y me dije:" Voy a sorprenderles esta noche". Estaba cortando la fruta, cuando pensé: "¿Por qué no le haces un almíbar que tanto les gusta?" Me daba pereza, pero enseguida me asaltó un pensamiento: “Se trata de dar”, me puse manos a la obra.

Estaba rodeado por un ambiente especial: “el del amor” así que me sentía alegre. Ya tenía el almíbar a punto, y lo iba a poner en una fuente para que todos se sirvieran de ella, pero el amor, volvió a tocarme y me dijo: “ se puede hacer mejor, coge unas copas de postre y haz raciones individuales". Jolín, estaba llenando la cocina de cacharros, para unas fresitas… Pero  el pensamiento de que esa cena iba a tener una grata sorpresa para ellos , hacía que me esmerase en todos los detalles.

Las copas tenían una pinta, que me costó resistirme a no probarlas. Pero aún podía mejorarse, y zas… otro toque de atención. El amor es así: insaciable. Me fui a mi terraza, a coger unas hojitas de menta, para darle un toque de color refrescante, al rojo de las fresas. Ese detalle, cambió su  aspecto, haciéndolas más atractivas para desearlas. Las estuve observando y pensé: “Esto es el resultado de un acto de amor”.

Como nos complicamos a veces, buscando aprobaciones en cosas grandes. En casa podemos encontrar tantas oportunidades… Cada prenda familiar que se plancha, es una ocasión para rezar por el propietario de ella. Es un momento, para pensar en sus necesidades y presentarlas al Señor. Cada plato que se recoge para lavar , cada bocata que se prepara, la compra que se hace, el aspirador que se pasa, cada objeto que ordenamos en el cuarto de cada uno… el amor nos reclama: “Ey, no te quedes en lo que haces, detrás de cada cosa, hay alguien…” .

¿Cuál es la mejor definición de Dios? ¡Dios es Amor! Ofreciéndolo todo a Él, nuestros actos adquieren un valor incalculable.

Os recomiendo tener una planta de menta en casa...

¡Alabado sea Jesucristo!

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8 comentarios

  1. Los pequeños detalles siempre engrandecen y tú nos has puesto un ejemplo precioso...y delicioso :)

    Gracias por ayudarme tanto,un cariñoso saludo.

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  2. El Amor hace que tooodo lo que hacemos se convierta en oracion agradable a Dios.
    Tengo una macetita de Hierba Buena.....y hoy pondré unas hojitas en una cazuelita de pescado...saldrá muy rica.
    Me ha gustado el saber que todo lo que tenemos en el dia son oportunidades para Amar....y si que el Amor es insaciable.....espero no desfallecer.

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  3. Hablando de hojas..., creo que tengo que comentar algo.., jejeje.
    Bueno Angel, como siempre tu post, me ha encantado porque me hace reflexionar y lo que es mejor... rezar.
    Te contaré que al leerlo, me ha hecho recordar la homilia que el pasado domingo hizo mi párroco, a próposito del Evangelio en el que los Apóstoles se preguntaban cual de ellos sería el primero.
    Como bien dices..., muchas veces buscamos la aprobación de los demás, su reconocimiento, incluso la palmadita en la espalda; pero creo que eso a veces, no debe ser confundido con el afán hedonista.
    Decía mi cura que el Señor..., en ningún momento les dijo que no destacaran.., ni que estuviera mal hacerlo, sino que descollarán en servicio de los demás: "Quien quiera ser el primero, que sea el último de todos y el servidor de todos"... exactamente como tu haces con los tuyos..., aún venciendo toda clase de perezas...
    ¡Vaya postre amigo! Cuando pueda comer normalmente..., te pediré que me mandes una ración.
    I love Angelo. Ciao caro.

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  4. Ya lo dijo san Juan de la Cruz: "En la tarde de la vida te examinarán en el amor".
    ¡Buena entrada!

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  5. Me encanta tienes toda la razón por amor a Dios que hermoso se vuelve todo,tengo en casa unas cortinas verdes que una amiga mia las hizo con amor,cada vez que me siento en el salóm pienso cuanto amor pone en su trabajo,tan simple y tan sencillo y tan significativo, y tu con tus detalles y la hojita de menta adornando las fresas, asi quiere Dios que adornemos nuestro corazón,aderezados con la sencillez del espíritu.
    Nerea.

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  6. Ay Angelo!!!!, ya sabía yo que algo me tenía Dios Padre que decir, cuando decidí leer esta entrada, que por momentos pensé no hacerlo por lo corta que estoy de tiempo. Le resto un poco a mi oración de la tarde para compartir lo siguiente. Mi esposo ha sido diagnosticado con insuficiencia renal, y por supuesto parte de su tratamiento es la alimentación, en los últimos años no se por qué razón, no me gusta cocinar; cuando hasta un libro de recetas de edición casera tengo. En fin, en estos momentos paso la mayor parte del día cocinando, preparando los almuerzos y cenas, almuerzos que lleva mi esposo al trabajo. Ha sido una lucha interna en "hacer las cosas ordinarias con amor extraordinario" su mejoría depende de lo que consuma y medir, pesar, comprar verduras y frutas dos y tres veces a la semana, no ha sido fácil para mi.Pero hoy tratando de variar su menú de vegetales me he puesto a buscar recetas y tratar de hacerlo con espíritu de oración, pensando en que su mejoría si es la voluntad de Dios, ocurrirá y para mi habrá sido una experiencia mas en el camino del servicio y la perfección humana. Trataré de conseguirme una matita de menta.Un abrazo a toda la familia.

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  7. Me encanta el post.
    Ah! Y las fresas maceradas con limón y hierbabuena están deliciosas.
    Te lo dice una que se ha llevado seis años de campañas freseras y las he probado de casi todos modos, porque hasta el último minuto que trabajé en el campo recolectandolas estuve comiendomelas a mansalva. Je,je.
    Un abrazo.

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  8. Amar son los pequeños detalles. Totalmente de acuerdo. Gracias.

    Bruce.

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