Tengo un buen corazón
¡Pues no pudo ser! No conseguimos
llegar a Santiago. Debo decir aquellas palabras, con las que empieza el
capítulo 16, del libro de los proverbios : “ Los propósitos del corazón son del
hombre, pero la respuesta de la lengua
es del Señor”. Traducido a un lenguaje más de la calle: “El hombre propone y
Dios dispone”.
No quiero alargarme en esta
entrada, sobre el Camino, ya que iré desglosando las etapas que pudimos hacer, en
mi otro blog: "Un Camino en mi sueño" (enlace) ,
hasta que Alicia y yo nos lesionamos.
Hemos recorrido 118 kms y en ese
punto lo dejamos. Mi pie izquierdo sufrió una severa metatarsalgia que me
impedía caminar, y Alicia contaba ya con unas dolorosas ampollas que le hacían
soltar alguna lagrimilla. ¡Se acabó el camino en esta ocasión!
La mayoría de los peregrinos con
los que compartimos estos días, tenían como meta, llegar hasta Logroño (135
kms) los abandonos se sucedieron desde la primera etapa. Así que nos damos por
satisfechos, haber arribado con los que finalizaban su etapa. La experiencia ha
sido fantástica y llena de bendiciones, pero eso, como he dicho antes, lo dejo
para mi blog del Camino que en breve
retomaré.
Hoy, quería hablar de la
perspectiva de Dios. Descubrir, como cada acontecimiento de nuestra jornada, está envuelto en un diseño
de amor divino.” ¿Por qué me ha pasado esto? ¿Porqué no ha salido como había
planeado?”… Queremos respuestas inmediatas, que satisfagan y serenen nuestro enfado. Basta aplicar y
confiar en lo que todo cristiano sabe: “Que
Dios siempre quiere, lo mejor para nosotros”, para que la gracia preparada por
el Altísimo, cale en nuestra alma y riegue la sequedad experimentada. ¡Y llegó
lo mejor de estos siete días!...
Alicia y yo esperábamos en la estación de Logroño, la salida de
nuestro tren. Faltaban casi tres horas para que pudiéramos subirnos a él. Hacía
mucho calor y decidimos quedarnos en la terminal. Al cabo de una hora, se
presentó ante nosotros, un hombre, con apariencia de discapacitado, y
dirigiéndose a mi hija con una gran sonrisa le dijo : “Oye chica,¿ cómo te
llamas?- Alicia me miró con una sonrisa mezclada con temor , y le dije con toda
mi convicción: “Es Jesús, que viene a acompañarnos”-.
Ella le miró y le contestó: “me llamo Alicia” – “Yo Paquito "-dijo él-, y dirigiéndose
a mí, me hizo la misma pregunta: “¿Y tú cómo te llamas? …- yo con la mirada de
la fe, y teniendo en ese momento, la gracia de ver al mismo Jesús, en medio de
nosotros, le contesté con todo mi cariño: “Me llamo Ángel”-, y volvió a repetirnos :“Yo Paquito, soy bueno,
tengo un buen corazón, no haga daño a nadie… ¡ ni quiero hacerlo!" – dijo levantando
la voz- y comenzó a contarnos adivinanzas, chistes, nos hizo trucos de magia, y
no paraba de manifestarnos, que “tenía un buen corazón”.
Nos reímos mucho,con la originalidad y amenidad que nos ofrecía, y a él se le
veía disfrutar con nuestra alegría. Le invitamos a tomar un refresco y unas
pastas, ese gesto, le hizo ser insistente en expresar su agradecimiento .
Estuvo con nosotros hasta que el tren llegó. Cuando bajamos al andén, miramos
hacia arriba y contemplamos, su silueta, tras el cristal de una valla. Estuvo
allí hasta que marchamos. Mi hija Alicia y yo, nos sentimos invadidos por una
emoción difícil de contener. Paquito estaba con los brazos en alto pegado al panel,
como si quisiera venirse con nosotros.
Una vez que el tren se puso en
marcha, le dije a Alicia, que habíamos recibido uno de los mejores regalos de la
semana. “Hemos sabido ver a Jesús en el prójimo” . Entendí que lo interiorizado
en estos días, había alimentado nuestra lámpara de la Fe. La primera
conversación que tuvimos en familia sobre el Camino, fue sobre Paquito.
Dios, siempre tiene una perspectiva, en
nuestra vida. ¡Entremos en ella! “Y cualquiera que os diere un vaso de agua en
mi nombre, porque sois de Cristo, de cierto os digo que no perderá su
recompensa” (Mc. 9, 41-50)
¡Alabado sea Jesucristo!
20 comentarios
Cuanto vamos a aprender de esta tu gran experiencia,yo sinceramente me hubiera dado la vuelta y no le hubiera echo caso a Paquito,asi soy de ingrata Angelo,por eso me gusta tanto leerte y sacar todo lo bueno que puede dar una persona.
ResponderEliminarEres muy especial Angelo y tus hijos tienen que estar muy orgullosos de ti.
Que Dios te siga bendiciendo,te dejo un cariñoso saludo :)
Angel , me has hecho emocionar,he recordado a mis padres q.e.p.d. mis abuelitos invitaban a pobrecitos,ellos son mis amigos ,son los que necesitan que les escuchemos,¿por qué no empezamos un mundo nuevo?. Un abrazo Josemaria y Amalia
ResponderEliminarHola Angel.
ResponderEliminarEs muy bello este episodio que nos cuentas y me has hecho emcionar.
Recibe mi enhorabuena.
Siempre digo que Jesús se manifiesta con los sencillos y desfavorecidos, en este caso, en mi modesta opinión, se os manifestó a través de Paquito.
Un abrazo desde Valencia, Montserrat
El camino deja huella...
ResponderEliminarA mi me da "miedo.respeto" cuando se me acerca alguien desconocido y especial, a hablarme. Alguna vez lo supero (pocas veces), otras muchas no.
Es un don del camino (del Señor o de Ntra Sra del camino) el sentirse más cerca del prójimo, de los otros hijos de Ntra Madre
Espero con muchísimas ganas, las historias de vuestra aventura
Ah y bienvenido a tu casa ¡¡¡ (queda un poco raro la bienvenida a tu casa, pero se entiende el sentido verdad? , que me alegro de que estes de vuelta a tu casa y a tu blog)
Eso es lo sagrado que envuelve la vida cotidiana... es la luz de Cristo en el corazón que empieza a trasladarse a la mirada ! Alabado sea Dios Angelo por la gracia que recibes junto a tu hija !
ResponderEliminarMuy buen post, lo pondré en unos días en mi blog para compartirlo con todos.
Un abrazo, invocando a Cristo.
Que entrada tan linda...si!!! claro que llegaron...llegaron al corazon de Jesus,se los demostro mandandoles una hermosa compania Paquito.
ResponderEliminarMil bendiciones a los dos y a tu familia entera.
Paquito precioso!!
ResponderEliminarHay muchos Paquitos cerca que hacen la vida más bella.
Gracias por compartir.
¡BIENVENIDO!
Yo si te he extrañado.
DTB!!
Cuando perdemos el miedo a esos Paquitos que se nos acercan, descubrimos un gran tesoro. me da mucho gusto compartir esta historia con vosotros.
ResponderEliminarUn abrazo y a recuperar fuerzas fisicas.
ANGELO lo lograron llegaron hasta donde JESUS los llevo......PAQUITO. DIOS los a llenado de luz para que la proyecten y es lo que haces en tu blog, bendiciones Martha V.
ResponderEliminarQuerido Ángelo,
ResponderEliminarMe ha emocionado muchísimo tu accidentado camino a Santiago, mi padre decía que si eso era lo malo que tenía que suceder !Bendito sea!, Dios siempre nos lleva por donde es lo mejor para nosotros. El personaje Paquito es !lo máximo!,ustedes lo hicieron feliz y él les dio alegría.
Un cariñoso saludo para Alicia, para ti y toda tu linda familia.
!QUÉ DIOS LOS BENDIGA A TODOS!.
FELIZ FIN DE SEMANA.
Un gran abrazo desde el Perú.
María del Carmen
Que bello relato, que ha nacido de ver a Dios en el prójimo, algo que todos debemos recordar, gracias.
ResponderEliminarMuchos saludos Angelo!
Angelo, che meravigliosa esperienza! Sono contenta che tutto stia procedendo bene (a parte qualche dolore e qualche vescica, ma spero abbiate portato l'occorrente per l'automedicazione!). Mauro ed io seguitiamo ad accompagnarvi con la preghiera. Domani è il mio compleanno spero vorrai ricordarmi nelle tue preghiere che al momento sono intrise di sudore, di dolore e di sacrificio.....meglio di così...Un grande abbraccio a te e alla tua bellissima figlia, con grande affetto....Buon proseguimento, che Gesù e Maria vi accompagnino...
ResponderEliminarUna pena no haber planteado solo la parte final del camino, se trata de los cien kilómetros realizados y hubieras disfrutado de la llegada a Santiago y te hubiera permitido compartir las vacaciones con la familia al menos en una parte. Dios escribe con renglones torcidos y quizás por ello te ha mostrado a Paquito como sustituto del resto del camino. También te ha devuelto con los tuyos tras mostrarte la experiencia de interiorizarle en la naturaleza, en la soledad, en el camino y que puedas compartir algunos días de vacaciones en familia Un cordial saludo
ResponderEliminarBienvenido Angelo:
ResponderEliminarGracias por tu entrada, me has emocionado!!!
Un abrazo,
EL Señor sabrá el por qué hasta donde llegaron, y seguro lo vivieron como él quería. El gozo que muestran tus palabras me indican lo sublime de las experiencias vividas. A recuperarse de las lesiones en familia. Un gran abrazo a todos.
ResponderEliminarBueno Angel yo creo que Dios tiene planes superiores al de cada uno de nosotros, en ocasiones utiliza caminos tan misteriosos solos para dejarnos comtemplar alguno de sus regalos divinos, que en nuestras fuerzas y planes se encapan de todo entendimiento...EL NOS LLEVA POR EL BUEN CAMINO y quizas nos permita recorrer algunos kilomentros para encontranos con El..esa es la intencion de Camino, el salir a su encuentro y dejarse encontrar por su amor en cada una de las personas...Yo creo que si lo terminaste, por ello me siento feliz, por ello los pense mucho durante estos dias de camino, no sin antes elevar un plagaria...Dios hace lo que quiere hacer en cada una de nuestras vidas...abrazos, saludos mi Angel para ti y tu preciosa hija..
ResponderEliminarMe ha encantado lo de Paquito. Ves, si hubiéseis saguido haciendo el Camino, no lo habríais conocido.
ResponderEliminarGracias.
ResponderEliminarQué entrañable!
ResponderEliminarQue testimonio tan maravilloso Angelo, que duda cabe, era Jesús!
ResponderEliminarUn abrazo!
Te invito a dejar tu opinión .Sepamos ofrecer lo mejor de nosotros. Bienvenida la crítica, acompañada siempre de la cortesía.