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Sigo en el camino


Estamos en esta parte del hemisferio en periodo de vacaciones, aquí llega el calor y en otros comienza la temporada de frío. Los que me seguís desde hace tiempo sabéis que solía dejar un mensaje para esta estación ,en el que uno entra menos en la red para disfrutar de esa oportunidad de descanso anual ,rompiendo la rutina diaria que nos sirve para apreciar otras cosas valiosas que en este mundo frenético no acabamos de valorar. 


Para nosotros que hemos sido bendecidos con el don de la fe, es una oportunidad preciosa para tomarnos ese "tiempo que decimos nos falta" para un trato más cercano con “Quien sabemos nos ama”.

Algunos me preguntan si ya abandoné el blog, y tengo que contestar que no; está en “stand by” ante un año complicado para mí. He tenido que afrontar varios frentes a la vez y no ha sido fácil. Alguno acompañado de tristeza como fue la muerte de mi padre en febrero pasado y otros llenos de alegría como es el próximo enlace matrimonial de mi hija el próximo 2 de agosto. Eso junto a otras acciones que he tenido que realizar, no me ha dejado tiempo para ir escribiendo emociones y sentimientos  que me apetecían compartir. Tengo ganas de hacerlo, así que pongo la esperanza que al comenzar el nuevo curso, tras las vacaciones, pueda reemprender una actividad más seguida en este blog que ya lleva diez años de andadura.

Decía San Juan Pablo II : “El descanso significa dejar las ocupaciones cotidianas, despegarse de las normales fatigas del día, de la semana y del año”. Nuestro cuerpos no son camiones de carga, ni máquinas que funcionan las veinticuatro horas del día durante los doce meses del año. Necesitamos descanso y esparcimiento. No podemos tenerlo siempre en tensión, pues se rompería.

Se cuenta de un santo que acariciaba apaciblemente una perdiz. De pronto un cierto filósofo se aproxima con aparejo de cazador y se maravilla de que el santo varón, que gozaba de tanta reputación, se entretuviera y perdiera el tiempo en cosas tan insignificantes como el acariciar a una perdiz. Entre los dos personajes se entabló este diálogo.

- “¿Eres tú el santo insigne del que me hablaron? ¿Por qué te entretienes en diversiones tan ridículas?” - pregunta el filósofo.
- “¿Qué es esto que llevas en la mano?” - le preguntó a su vez el santo varón.
- “Un arco” -respondió en filósofo.
- “Y, ¿por qué no lo llevas siempre tenso?” -Dijo el santo.
- “No conviene - responde el filósofo-, pues si estuviese siempre tenso se echaría a perder el arco. Así, cuando fuera necesario lanzar un disparo más potente contra alguna fiera, por haber perdido su fuerza debido a la continua rigidez, el tiro no iría ya con la violencia necesaria”.
- “Pues bien, -concluyó el santo- no te admire tampoco, joven, que yo conceda a mi espíritu este inocente y breve esparcimiento. Si de vez en cuando no le permitiese descansar de su tensión, concediéndole algún solaz, la misma continuidad del esfuerzo le ablandaría y aflojaría, y no podría obedecer a las órdenes y a las exigencias del espíritu”.

Disfrutemos de este tiempo, dando gracias de poder hacerlo. Vivimos en un mundo insolidario donde muchísimos no saben ni si quiera lo que son días de vacaciones. No lo olvidemos.

Felices vacaciones  y un fuerte abrazo.

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6 comentarios

  1. Miguel García de Lomas03 julio, 2019 10:11

    Me alegro leerte de nuevo.Enciende tus “calderas” y dale avante a tus ideas, hacia ese mundo cobarde en el vamos navegando perdiendo el Norte real que Solo Puede Marcar Dios.Un fuerte abrazo familiar: Miguel

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  2. Parece que este año ha comenzado complicado para más de uno... pero como dices, ahora es tiempo de descanso, al menos de algunas actividades para centrarnos más en otras cosas que necesitan de toda nuestra energía.
    Me ha alegrado leerte de nuevo... disfruta de tus vacaciones y de ese evento tan especial que está por llegar.

    Un abrazo y hasta pronto.

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  3. Felices vacaciones y feliz boda. Alegría de leerte, santo hombre.

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  4. Siento lo de tu padre y a la vez te felicito por la boda de tu hija.Mis últimos años tampoco han sido nada de fáciles pero seguiremos al pié del cañón.Felices vacaciones.Saludos

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  5. Qué alegría leerte y saber de ti.
    Un fuerte abrazo y Dios te bendiga.

    «El que pone en Dios su confianza se libra de toda preocupación, no tiene ya miedo de nada ni de nadie, es un ser libre. Un santo puede seguir teniendo miedo de los acontecimientos, pues le desconcertarán siempre, pero no tendrá miedo de Aquel que dirige los acontecimientos, pues sabe «en quién tiene puesta su fe»» (2 Tim. 1,12).

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  6. Te tengo en preferidos para leerte.
    Ahora hacia dies q no abría el blog q sorpresa.
    Muchos ánimos con la pérdida de tu Papá, mi Mamá murió el 3 de Agosto del 16, ara 3 años y no puedo olvidarla.
    Q vaya muy bien la boda, a mi tmb se casa un hijo el 14 de sept. ������������

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