Todo tuyo, siempre
San Luis María Grignion de Montfort, en su "Tratado de la Verdadera Devoción a la Santísima Virgen" nos enseña falsas devociones a María que fácilmente podrían tomarse como verdaderas. El padre de la mentira está detrás de ellas y el santo nos enseña a distinguirlas. Creo que es interesante conocerlas, así que en diferentes post las iré compartiendo. Hoy me centro en la tercera clase que él ha catalogado de falsos devotos : "los devotos exteriores".
"Los devotos exteriores son personas que cifran toda su devoción a María en prácticas externas. Solo gustan de lo exterior de esta devoción, porque carecen de espíritu interior. Rezan muchos Rosarios, pero atropelladamente. Participan en muchas Misas, pero sin atención. Se inscriben en todas las cofradías marianas, pero sin enmendar su vida, sin vencer sus pasiones, ni imitar las virtudes de la Santísima Virgen. Sólo gustan de lo sensible de la devoción, no buscan lo sólido. De suerte que si no experimentan algo sensible en sus prácticas piadosas, creen que no hacen nada, se desalientan y lo abandonan todo o lo hacen por rutina.
El mundo está lleno de esta clase de devotos exteriores. No hay gente que más critique a las personas de oración, que se empeñan en lo interior como lo esencial, aunque sin menospreciar la modestia exterior, que acompaña siempre a la devoción verdadera."
Leyendo este consejo, me viene el recuerdo de un poema de Gloria Fuertes que me sorprendió en su día, denunciando ese mercadeo que rodean algunos santuarios en la adquisición de imágenes religiosas, y que a veces se asemejan a nuestras prácticas de piedad.
Virgen de Plástico
Con su manto de nylon
y la corona eléctrica,
con pilas en el pecho
y una sonrisa triste,
se la ve en las vitrinas de todos los comercios
y en los sucios hogares de los pobres católicos.
En Nueva York los negros
tienen su virgen blanca
presidiendo el lavabo
junto a la cabecera…
Es un cruce de Virgen entre Fátima y Lourdes,
un leve vaciado con troquel “made is USA”,
tiene melena larga y las manos abiertas
es lavable y si cae no se descascarilla.
Las hay de tres colores,
blancas, azules, rosas
-las hay de tres tamaños-
-aún la grande es pequeña-
Virgen pura de plástico,
se me quitó la gana
de pedirte un milagro.
Me ayudó a reflexionar sobre como era mi devoción a la Virgen.¿Qué imagen tengo de María? ¿Me quedo en lo externo? ¿La siento como Madre...?
Nuestra devoción a la Virgen que en este mes consagrado a Ella le mostremos, tiene que presentarse sin envoltorio, sin adornos, con la entrega confiada de un hijo que se sabe necesitado de su Madre. San Juan Pablo II , nos enseñó una manera muy sencilla de hacerlo. Ir a María, ponerse ante Ella y dejar que las palabras se formen en el corazón, al salir de nuestra boca : "Totus Tuus".
6 comentarios
Muy interesantes van a ser estas entradas,gracias Angelo.
ResponderEliminarUn cariñoso saludo :)
Cuanta razón Angel en esta reflexión, qué manera más sencilla y certera de recordarnos con qué profundidad y solidez vivimos la devoción a Nuestra Madre. El día a día transcurre a veces, tan atropelladamente que convertimos nuestras prácticas de piedad en un cumplimiento rutinario y cuando me paro y lo pienso me invade una profunda tristeza.
ResponderEliminarGracias, gracias por hacerme parar una vez más... Aún queda mucho mes de María!
Un abrazo fuerte!!
Es Mamá, mi mamá, pero si hay que mirar si la tengo en serio o no!!!
ResponderEliminarGracias, Angelo una vez más, como ayudan tus entradas!!!
Cuánta luz hay este blog!!!!
Me quedo con una imagen de la VIRGEN sencilla y sin adornos cómo tenía que ser en su vida en la tierra. Saludos
ResponderEliminarque bello y que cierto....hoy en Argentina celebramos la patrona de Lujan ,Patrona de argentina....nuestra madre es esto lo que me salio del corazon:Con la alegría
ResponderEliminarde sabernos amados
por una MAMÁ
QUE NOS AMA
DE MANERA ESPECIAL.
Con alegría
de sentir el abrazo
de una MADRE DEL CIELO.
Con la alegría de saber
que me cuida
a pesar
que estoy lejos.
Con la Alegría
de saber que me espera
con amor en el cielo.
yo te canto,maría,mi madre,
soy tu hija,
ven hoy a mi cielo.
Con la alegria
de saber que
me abrazas ,
aunque yo no te veo.
Hola Ángel hace tiempo que no entraba a tu bolg pero siempre estoy pendiente de tus opiniones cuantan, queria decirte que la propuesta de tratar El tratado de verdadera devoción valga la redundancia me encanta, me alegra, creo que es necesario hacerlo también cuenta con ,mis oraciones para quemucha gente lo lea y se convierta,porque a decir verdad El tratado me trae muchos y bellos recuerdos cuando comence a mis 19 años a profundizar con María, quererla deveras, no a medias,conozco gente mayor que está en el camino de la fé y tiene mucho temor a sentirse interpelado por el tratado y no avanzan, por eso te doy las gracias por este camino que emprendes en tu bolg
ResponderEliminarUn beso a los siete
Nerea
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