Feliz Pascua
Muchas veces he pensado yo que la gran pregunta que Cristo va a hacernos el día del juicio final es una que nadie se espera. «Cristianos —nos dirá—: «¿Qué habéis hecho de vuestro gozo?». Porque Jesús nos dejó su paz y su gozo como la mejor de las herencias: «Os doy mi gozo. Quiero que tengáis en vosotros mi propio gozo y que vuestro gozo sea completo», dice en el Evangelio de San Juan. «No temáis. Yo volveré a vosotros y vuestra tristeza se convertirá en gozo», dijo poco antes de su pasión. Y también: «Si me amáis, tendréis que alegraros». «Volveré a vosotros y vuestro corazón se regocijará y el gozo que entonces experimentéis nadie os lo podrá arrebatar». «Pedid y recibiréis y vuestro gozo será completo».
¿Y qué hemos hecho nosotros de ese gozo del que Jesús nos hizo depositarios? Es curioso: la mayor parte de los cristianos ni siquiera se ha enterado de él. Son muchos los creyentes que parecen más dispuestos a acompañar a Jesús en sus dolores que en sus alegrías, en su dolor que en su resurrección. Pensad por ejemplo: durante las semanas de Cuaresma se celebran actos religiosos especiales, con penitencias, con oraciones. Pero, tras la resurrección, la Iglesia ha colocado una segunda cuaresma, los días que van desde la resurrección hasta la ascensión. ¿Y quién los celebra? ¿Quién al menos los recuerda?
Impresiona pensar que en el Calvario tuvo Cristo al menos unos cuantos discípulos y mujeres que le acompañaban. Pero no había nadie cuando resucitó. Da la impresión de que la vida de Cristo hubiera concluido con la muerte, que no creyéramos en serio en la resurrección. Muchos cristianos parecen pensar —como dice Evely— que tras la cuaresma y la semana santa los cristianos ya nos hemos ganado unas buenas vacaciones espirituales. Y si nos dicen: «Cristo ha resucitado»; pensamos: qué bien. Ya descansa en los cielos. Lo hemos jubilado con una pensión por los servicios prestados. Ya no tenemos nada que hacer con Él. Necesitó que le acompañásemos en sus dolores. ¿Para qué vamos a acompañarle en sus alegrías?
Y, sin embargo, lo esencial de los cristianos es ser testigos de la resurrección. ¿Lo somos? ¿O la gente nos ve como seres tristes y aburridos? ¿O piensa que los curas somos espantapájaros pregoneros de la muerte, del pecado y del infierno únicamente? Tendríamos que recordar que los cristianos somos ante todo eso: testigos de la resurrección, mensajeros del gozo.
¿Y qué hemos hecho nosotros de ese gozo del que Jesús nos hizo depositarios? Es curioso: la mayor parte de los cristianos ni siquiera se ha enterado de él. Son muchos los creyentes que parecen más dispuestos a acompañar a Jesús en sus dolores que en sus alegrías, en su dolor que en su resurrección. Pensad por ejemplo: durante las semanas de Cuaresma se celebran actos religiosos especiales, con penitencias, con oraciones. Pero, tras la resurrección, la Iglesia ha colocado una segunda cuaresma, los días que van desde la resurrección hasta la ascensión. ¿Y quién los celebra? ¿Quién al menos los recuerda?
Impresiona pensar que en el Calvario tuvo Cristo al menos unos cuantos discípulos y mujeres que le acompañaban. Pero no había nadie cuando resucitó. Da la impresión de que la vida de Cristo hubiera concluido con la muerte, que no creyéramos en serio en la resurrección. Muchos cristianos parecen pensar —como dice Evely— que tras la cuaresma y la semana santa los cristianos ya nos hemos ganado unas buenas vacaciones espirituales. Y si nos dicen: «Cristo ha resucitado»; pensamos: qué bien. Ya descansa en los cielos. Lo hemos jubilado con una pensión por los servicios prestados. Ya no tenemos nada que hacer con Él. Necesitó que le acompañásemos en sus dolores. ¿Para qué vamos a acompañarle en sus alegrías?
Y, sin embargo, lo esencial de los cristianos es ser testigos de la resurrección. ¿Lo somos? ¿O la gente nos ve como seres tristes y aburridos? ¿O piensa que los curas somos espantapájaros pregoneros de la muerte, del pecado y del infierno únicamente? Tendríamos que recordar que los cristianos somos ante todo eso: testigos de la resurrección, mensajeros del gozo.
José Luis Martín Descalzo
16 comentarios
ALELUYA, Resucitó.
ResponderEliminarÉl es nuestra esperanza.
Feliz Pascua!!!! :)
ResponderEliminarUn cariñoso saludo :)
¡FELIZ PASCUA DE RESURRECCIÓN ANGEL! Procuremos y consigamos, como dices, dar cuenta de que Jesús, Dios y Hombre verdadero ¡Resucito!
ResponderEliminarEstimado Ángel... Feliz Domingo de Resurección y actualizo ese texto de Descalzo.
ResponderEliminarBuscamos a Jesús en la oscuridad, allí donde no está. Porque Él es la LUZ. Reducimos la Resurrección a un dogma, a unas palabras que hay que creer y no VIVIMOS la Resurrección. No acabamos de entender que Dios es un Dios de vivos, no de muertos. Que Jesús está en los pobres, en los enfermos, en los perseguidos, en los presos, en los hambrientos...en todos los crucificados de este mundo. Y que Dios, como a Jesús, les dará la vida.
Feliz Pascua a todos, Jesús, está VIVO con nosotros.
Cristo è risorto: rallegriamoci !
ResponderEliminarBuona Pasqua !
¡ Feliz Pascua de Resurrección Ángel ! Cierto, nos olvidamos del gozo, o no lo vivimos porque nos falta vida de oración
ResponderEliminarunión con el Señor.Solo nos acordamos de sus dolores, porque todo el mundo tenemos sufrimiento...pero este sufrimiento
no llega al gozo por falta de encuentro con Cristo Resucitado.¡GRACIAS! Un abrazo Pascual.!!!
Feliz Pascua de Resurrección a todos mis amigos blogueros!!
ResponderEliminarQué bonito el texto de Martín Descalzo, hagamoslo vida en nosotros.
Es verdad! Yo lo creo!!... porque lo experimento en mi día a día, Cristo Vivo es el único capaz de dar luz a mis oscuridades, de fortalecerme en mis debilidades, de perdonar lo que yo no me perdono, de recomponerme cuando me rompo, de levantarme cuando me caigo, de devolverme la vista cuando estoy ciega, de abrir mis oídos que tantas veces no oyen..... El único que me quiere tal y como soy, además sigue contando conmigo cada día con una santa paciencia sin merecérmelo. Porque a El nunca le ganamos en generosidad.
Gracias por toda tu ayuda Angel. Me haces mucho bien!
Un abrazo fuerte
FELIZ PASCUA DE RESURRECCIÓN.........ALELUYA, ALELUYA EL SEÑOR RESUCITÓ.
ResponderEliminarEste reflexión de mi admirado Martín Descalzo tiene toda la razón así que me quedo con el gozo de Jesús vivo velando por todos nosotros.Saludos
Santa y feliz Pascua para ti, Angel y para todos.
ResponderEliminarUn abrazo en el Resucitado.
Feliz Pascua de Resurrección Angelo!!.. y a todos los demás que entráis aquí también, como me gustaban los comentarios de José Luís Martín Descalzo..
ResponderEliminarPues si, Cristo ha resucitado y Vive !!.. y dijo además que Él estaría con nosotros todos los días hasta el fin de los tiempos.. donde 2 o más están reunidos en mi nombre.. allí estaré yo entre vosotros... hasta que vuelva tal y como se fue sobre las nubes del cielo... como les dijeron aquellos ángeles a las mujeres que habían ido a visitarlo al sepulcro..: Por qué lloráis?.. Él no está aquí.. Ha Resucitado..!.. felicidades a todos..
Feliz Pascua, Ángel!!!
ResponderEliminarMe quedo con la última frase del texto de José Luis Martin Descalzo "Tendríamos que recordar que los cristianos somos ante todo eso: testigos de la resurrección, mensajeros del gozo", porque es eso lo que debemos ser y hacer!!!!!
Un abrazo a toda la familia!!!!
Hermano, una muy Feliz Pascua de Resurrección para tí y los tuyos.
ResponderEliminarUn abrazo grande en el Resucitado
Paz y Bien
Ricardo
Gracias, Ángel. Precioso texto.
ResponderEliminar¡Feliz Pascua!
Un abrazo fuerte.
Felice Pasqua! Il Signore è veramente risorto, egli è l'unico fondamento della nostra vita, alleluia! Un grandissimo abbraccio a te e famiglia
ResponderEliminarFeliz Pascua!
ResponderEliminarQue JESUS resucitado los acompañe a todos los blogueros.
Martha V.
¡Feliz Pascua de Resurrección!
ResponderEliminarUn abrazo.
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