Todavía estoy en shock
Seguramente habréis visionado el testimonio e Joanne Milne, que la semana pasada apareció por las redes sociales y medios de comunicación. En ellos se mostraba como algo extraordinario,las lágrimas que Joanne no puede contener al poder oír por primera vez. Ella nació con el Síndrome de Usher y fue perdiendo vista poco a poco hasta quedar practicmente ciega.
Hace un mes fue intervenida para colocarle unos implantes y el resultado podemos verlo en el vídeo que acompaño. Sus palabras mezcladas con lágrimas fueron : "Ha sido la experiencia más emocional y abrumadora de mi vida. Todavía estoy en shock""No puedo dejar de llorar esto me va a cambiar la vida".
¡Dios mío! yo tampoco pude evitar conmoverme, con lo que mis ojos veían. Y no pude eludir la fuerza con la que me sentí interpelado. Tomé conciencia del valor de cada parte de mi cuerpo; desde la punta del dedo meñique del pie, hasta el último cabello del que Dios está pendiente de que se caiga. Me sentí invadido por un sentimiento de ingratitud hacia el Creador por tantos días, meses, años, sin agradecerle el sonido escuchado, el color distinguido, la caricia recibida,el aroma percibido,el sabor experimentado...
¿Qué ha sido lo excepcional , lo impactante para que un acontecimiento apareciera como noticia universal? Que una mujer se emocionara ante la primera vez que puede escuchar el sonido. Esa es la primicia, eso es lo que asombra, cuando debería ser lo habitual. Que cruel es la rutina, impidiendo conmovernos, antes las maravillas que a diario se presentan en nuestra jornada.
¡Dios mio, que facilidad para transformar tus dones! Lo extraordinario, cómodamente se va degradando, convirtiéndose muy pronto en común y repetitivo, en ingratitud y queja, acabando muchas veces en exigencia y obligación! Regalos inapreciados, que aún esperan ser abiertos y sorprender. Esa es la percepción que Joanne Milne, me ha dejado.
¿Cuándo y cuánto hemos agradecido a Dios, poder gozar de nuestros sentidos, que nos permiten percibir lo que está a nuestro alrededor?
"Dad gracias, continuamente y por todo a Dios Padre, en nombre de nuestro Señor Jesucristo" Ef.5.20
9 comentarios
Querido Angelo!
ResponderEliminarCuando estamos en sintonía con Dios, sentimos, percibimos y vivimos la presencia de El en todo nuestro proceder diario.
Esto nos ayuda a ser más conscientes que en Cristo nos movemos y existimos. Y por consiguiente nos ayuda a ser más agracecidos con todo lo que a diario nos regala.
El Señor ha estado grande con nosotros y estamos alegres, dice el Salmo.
Lo malo es la rutina, la dichosa rutina que nos tapa la vista y no nos permite ver lo evidente. Hay que luchar contra ella es mala consejera.
Un fuerte abrazo! Y gracias por interpelarme una vez mas
No lo habia visto y es conmovedor,gracias Angelo.
ResponderEliminarUn cariñoso saludo :)
Es una gran lección. Debemos estar alegres por todo lo que hemos recibido de Dios, los sentidos, todo lo maravillosos a nuestro alrededor que con ellos podemos apreciar y todas las personas que nos acompañan. Puede que algo nos falte pero aun así debemos poner en la balanza tanto, tanto, por lo que decir GRACIAS PADRE MÍO.
ResponderEliminarCreo que es la misma sensacion que sienten, los que dejan entrar a Jesus en sus corazones por primera vez...que alegria,que gozo ,que bendicion Senor eres tu para nosotros.
ResponderEliminarPreciosa la entrada y el video espectacular!
Gracias Angelo.
Mil bendiciones.
Así es. No nos damos cuenta de los valores añadidos que tenemos, por supuesto, valores añadidos por Dios. No nos hacemos idea de las grandes suertes que poseemos, y lo digo en plural porque son muchas gracias a Él. Me he emocionado mucho con ésto. Un abrazo Ángel.
ResponderEliminarCuantas veces nos pasa de largo la mano de Dios y sus pequeños grandes milagros de lo cotidiano y "natural" para la mayoría. Un abrazo
ResponderEliminarPobre mujer, qué emoción tan grande tiene de poder oir que hasta le tiemblan las manos, los brazos y todo el cuerpo...Nos alegramos con ella y contigo, Angel, que nos la has traído hasta tu blog. Feliz domingo.
ResponderEliminarDios mío cuantas y cuantas veces he dejado de darte gracias...........Saludos
ResponderEliminarUfffffffff......me haces pensar!!!...la de Gracias que tenemos que dar a la Vida, a Dios que nos dá tantisimas Gracias!!! Es conmovedor!!
ResponderEliminarTe invito a dejar tu opinión .Sepamos ofrecer lo mejor de nosotros. Bienvenida la crítica, acompañada siempre de la cortesía.