CANSADOS Y AGOBIADOS
El lunes amaneció nublado en Cataluña , de esos días en que el dolor llama a nuestra puerta. Era la jornada prevista, para reanudad mi actividad deportiva. La fibromialgia se apoderó de mi cuerpo y se negó a levantarse para poder cumplir mi propósito. Una vez más tuve que aceptar mis limitaciones y esperar a que la crisis desapareciera. Como necesitaba más descanso, tuve la oportunidad de visitar un poco más, las bitácoras amigas y me sorprendió el estado anímico que reinaba en varias de ellas.
Hablan del síndrome post-vacacional. Describen los síntomas enumerándolos como : desánimo, nostalgia, tristeza, cansancio, en fin… de esas cosas que hoy tanto gustan diagnosticar y ponerle nombre, para que los laboratorios pongan en marcha su máquina de producir pastillas y mejunjes que engrosen sus bolsillos.
Entiendo perfectamente que se adjudiquen este síndrome a los que no tienen ideales, a los que realizan un trabajo de forma mediocre, a los que les importa un bledo la empresa, los jefes, los compañeros y todo lo que tenga que ver con trabajar. Su alegría volverá a finales de mes cuando vean su nómina ingresada.
A todos aquellos que luchamos diariamente por ser fieles y coherentes con nuestra fe, no debe afectarnos para nada este síntoma. Para nosotros, debe ser una acción de gracias, por haber tenido la oportunidad de unos días de sosiego, cuando hay tantos que no han podido permitírselo. Debe ser una alabanza a Dios, al poder llenar con lo seres queridos, aquellos vacíos que durante el año se crean. Debe existir la alegría de poder retomar un trabajo, que debemos valorar como una bendición, al ser unos privilegiados, que pueden acudir a diario a realizarlo. Las energías renovadas tienen que aplicarse de forma gozosa, arrastrando a los demás hacia el entusiasmo y la alegría. Creo que es el momento más propicio para ser testimonios de la luz que llevamos dentro.
Nuestros compañeros vienen decaídos y están hambrientos de palabras de vigor.
A los que encontré pocho, les quiero decir: ¿Pero de qué os extrañáis? Cuando uno está en la batalla y en la lucha, está dándolo todo, no hay descanso, siempre avanza. Pero en algún momento, su esfuerzo pasa factura, se queda cansado, agobiado, sediento y abatido, ¿Cuánto más tiene que seguir caminando y batallando? ¿Cómo no van a llegar esos lapsos de nostalgia, donde uno se encuentra solo, sin saber donde están sus compañeros de lucha?
Es lo que nos toca. Estamos en el mismo camino, a veces vamos juntos, a veces ante la cantidad de ataques unos corren más que otros y empezamos a dispersarnos para acudir a todos los puntos donde se nos embiste. Y hay etapas que no vemos a nadie caminando a nuestro lado.
Aquí estamos unidos por la misma causa, desde lugares lejanos, pero todos enlazados, reconfortándonos. Me parece estupendo que confesemos esos instantes de cansancio, de desaliento de soledad. En estas páginas de las que cada día bebemos, podemos encontrar esa agua que nos ayudará a seguir en la brecha, siempre habrá uno que nos dará su vaso para beber. Bienvenidos esos días de desaliento. Señal de que estamos en la contienda. Bienvenidos esos momentos de soledad, porque nos obliga a valorar a quien tenemos a nuestro lado. Bienvenidos esos días de noche oscura del alma, porque ella nos enseñará con más fuerza la luz que la ilumina. Bienaventurados nosotros que tenemos el don de la Fe , y hago hincapié en la palabra FE: Creer lo que no se ve. ¿Os parece poco este regalo? ¿Puede haber algo más audaz y noble que seguir con entusiasmo a “QUIEN” no vemos?
Pues dejémonos curar unos a otros.
Angel ST
7 comentarios
Gracias Angel por entrada. Hoy me levante "reptando" espachurrada... Y pensé : después de tanta energía este verano , voy a ser tan tonta de sentirme aplatanada , ahora que empieza el curso y tengo que dar lo mejor de mi?
ResponderEliminarPues si, creo que lo mejor es no hacerse caso.
Esto debe ser como el deporte, cuando no llegas, entrena más y llegarás.
Buen día a todos!
Venid a mi los que estáis cansados que yo os aliviaré.... que gran cita!
ResponderEliminarUn abràs. (En valenciano)
La fuerza: del Sagrario.
ResponderEliminarGracias Angel.
¡Guau, Angel, como decimos en mi tierra "peazo post"! ¡Felicidades, de verdad!
ResponderEliminarYo tengo mi opinión particular sobre este síndrome, que aparece cada año, invadiendo las noticias de televisión, como si fuera el calor en el verano.
Yo, como ama de casa, no lo conozco, y no creo que lo conozca nunca, porque entre otras cosas, parece que no tenemos derecho a padecerlo. Solo es propiedad de los que "trabajan", bueno, mejor dicho, de los que les pagan por trabajar, jejeje. Y creo que no lo conoceré nunca, porque mi vida está "LLENA" y no pienso solo en lo que tango que barrer o fregar, y si la plancha o la cocina es un tostón.
Mi opinión particular sobre esta epidemia que nos tratan de meter a cañonazos, es la falta de valores y la falta de ilusiones que tenemos es este mundo tan falso y tan vacío.
Las personas, parece ser que solo tenemos que vivir para la diversión, y una vez que se acaba, ya lo demás es costoso de llevar.
Al gobierno le interesa que ahora se hable del síndrome post vacacional, y no de la crisis, del paro, de la política desastrosa en general, que no está llevando a la ruina, pero si se habla de otras cosas, la gente está entretenida y no se preocupa y no se entera.
Después del síndrome, vendrán las noticias de lo que cuestan los libros de nuestros niños, de la vuelta al cole, etc. etc, y así nos tendrán entretenidos hasta que el señor de la lotería de Navidad y los turrones invadan nuestras televisiones, y así iremos pasando el año.
Bueno, parece ser que me he extendido un poquillo.
De verdad, te felicito otra vez, y yo creo que en este fantástico post, das las claves de en lo que no tienen que caer las personas, para que este bendito síndrome les invada.
Un abrazo.
Angel, Como bien dices cuando uno esta lleno de Fe en el Señor (en mi caso particular), no hay cupo para estos "sindromes",hay que dar gracias por que solo por hoy tenemos un techo, comida, recursos, cuando tanta gente no lo tiene, y por que el trabajo cuando de momento se vuelve fastidioso, se puede ofrecer por todos aquellos que estan en circunstancias deprobables, en fin cuando uno esta en un camino de lucha espiritual, todos estos "sindromes" son ilusorios, gracias por tu reflexión.
ResponderEliminarPseudonima : No quiero ni explicarte, la cantidad de gente que el lunes si D.q.voy a encontrar en urgencias con este síndrome. Nosotros a coger fuerza en la Eucaristía. Ya sabes a Irradiar alegría.
ResponderEliminarÁngel: ¿Qué tal van los primeros días de adulto? Ya sabes, aquí también se aplica lo del desaliento. Toda tu energía de 18, con el turbo puesto
Nuria. Me alegra también tu fidelidad y encontrate aquí. No me dejes
lojeda.
Has vuelto ha realizar otro post genial en mis comentarios. Da gusto tener a seguidores como tú. Un abrazo
Gracias Angel por tus palabras, solo he entrado para desearte mejoría y paciencia en tu enfermedad,
ResponderEliminarUn abrazo
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